Luego de producir Los asesinos de la luna y Napoleón, Apple lanza en las salas de todo el mundo otro “tanque”, Argylle: agente secreto, un thriller de espías de 200 millones de dólares de presupuesto e imponente elenco a cargo del director de No todo es lo que parece (2004), Stardust: El misterio de la estrella (2007), Kick-Ass (2010), X-Men: Primera generación (2011) y la trilogía de Kingsman (2014 / 2017 / 2021).
Argylle sólo es un personaje de una saga de novelas escritas por Elly Conway (Bryce Dallas Howard), una autora reconocida que está presentando su nueva entrega. Elly tiene muchos conocimientos sobre el mundo del espionaje, pero la escritora muestra sus inseguridades cuando sale de su zona de confort.
Su vida da un giro de 180 grados cuando se encuentra en el tren con Aiden, un espía de carne y hueso que está muy lejos de parecerse al agente de sus novelas. A partir de ese momento corre peligro y hay una divertida escena para introducir al personaje de Sam Rockwell al estilo Bullet Train. Loca, disparatada y que revela las intenciones reales de Vaughn con esta película.
No conviene adelantar demasiado de una trama pletórica de plot twists, permanentes giros, vueltas de tuerca, sorpresas, cambios de rumbo, pero el guion de Jason Fuchs (el mismo de Mujer Maravilla) apela al ya bastante remanido recurso del autor (autora en este caso) sumergido dentro de su propia ficción (o construyendo ficción a partir de su realidad).
La película no solo aparenta ser la primera de una nueva saga sino que el propio Vaughn ya ha adelantado que será parte de un «multiverso» en el que, de algún modo, se las combinará con las tres películas de KINGSMAN, en lo que promete ser un festín para los fans de este director británico de la escuela de Guy Ritchie que ama los efectos digitales, las cámaras lentas, las persecuciones y los combates de todo tipo, siempre en un tono zumbón, supuestamente liviano y lúdico, sin hacerse problema alguno por la lógica y la plausibilidad.
La crítica
Argylle: el agente secereto
Pros
- Los plot twists
Contras
- Por momentos demasiada acción