Subir una foto de alguna novela de Sally Rooney en redes se ha convertido en un “must” en los lectores millennials. Y, como una especie de fenómeno literario de una generación, a esta escritora se la identifica como la “Salinger de la era Snapchat”. La novela “Conversaciones entre amigos” se publicó en 2017 y recibió grandes reconocimientos por la crítica. Luego llegaría “Normal People” y casi inmediatamente a este éxito comenzó a grabarse la serie basada en su novela para la cadena británica BBC Three y que también está disponible la plataforma Hulu. Así, la llegada al mundo televisivo y digital le terminó de dar la popularidad que le faltaba.
Así en plena cuarentena, Normal People es un verdadero boom, con más de 23 millones de visitas en los episodios descargados desde la plataforma digital de BBC. Esta historia que narra la relación entre Marianne (Daisy Edgar-Jones) y Connell (Paul Mescal, que hace su debut televisivo en esta serie) está ambientada en la Irlanda actual. Ella es una chica de una familia acomodada y él, en cambio, es el hijo de la persona que limpia la casa de Marianne.
Ambos coinciden en el colegio al que asisten, en el que Connell es el chico popular y exitoso en los deportes, además de ser buen estudiante. Marianne es impertinente ante las autoridades de la institución educativa, no tiene amigos, no asiste a fiestas ni forma parte de ningún grupo de intercambio social. Se muestra arisca a las relaciones con sus pares pero con Connell vive una relación diferente. Ella la chica rica que se enamora del joven pobre. Pero nada tiene que ver con aquellas telenovelas que planteaban esta diferencia social tan llena de lugares comunes. Esta distinción es sólo una descripción del personaje que apenas arroja un dato más, pero eso es todo. De hecho, la autora, dijo sobre el rol de Marianne: “No quiero caer en esterotipos ofensivos pero quiero tener la libertad de crear personajes femeninos que no sean robots feministas, que nunca hayan cometido errores”.
El piloto de Normal People es casi perfecto: la presentación de los personajes, el ambiente, todos alejados de los clichés de la series para millennials. Se invierten todo lo obvio y así la serie hace que la tomemos en serio.
El amor entre ambos surge y Connell decide que mantengan su relación en secreto. ¿Qué podrían pensar sus compañeros de este vínculo con la chica más “rara” de la clase? Pero en un momento la situación se invierte y él debe enfrentarse a las implicancias del “anonimato”.
Esta ficción también explora sin ningún pudor en las relaciones sexuales entre los jóvenes, como pocas se ha hecho antes en las series. De hecho el diario inglés The Sun publicó un informe sobre la cantidad de escenas de sexo, que en toda la historia suman 41 minutos entre sus 12 episodios. Por su parte The New York Times coincidió con esta apreciación y la calificó como la “serie que se toma en serio el sexo”. De hecho los encuentros en la cama son una búsqueda de placer, pero intentando lograr el deseo propio y también el del otro. Hay amor, lujuria y descubrimiento con mucha curiosidad.
La serie cuenta con Ita O’Brien como “coordinadora de intimidad”, una tarea que se incorporó a las películas y series en los últimos años, que les indicaba a los actores cómo tocar, besar y simular las escenas de sexo.
Paul Mescal debuta en esta serie como actor de televisión, con una formación previa de dos años en teatro y a esta altura ya se lo menciona como el nuevo James Bond. Tal es la popularidad de este actor que en Instagram unos fans le hicieron una cuenta al collar con el que aparece durante la serie (@connellschain).
Normal People es un refresco en una época donde las series se fabrican de manera industrial. Es una propuesta novedosa, diferente, sobre nuevos tiempos y amores con nuevas reglas. Nos lleva por caminos que no hemos transitado y nos hace perder en los vericuetos del alma, del deseo y del amor. Es una ficción que conmueve, pero también puede devastarnos. Y lo mejor: nos invita a descubrir el amor, a llorar, a definirnos, a pelearnos con nosotros mismos y también a amigarnos. Un diamante en bruto que, por ahora, la encontrás en la plataforma Hulu.